Lean Six Sigma, más que una metodología de gestión de procesos
Para las empresas de hoy, cada error tiene un impacto, ya sea en el presupuesto, pérdidas, equipo o la mala experiencia de los consumidores. Por ello, se ha visto la necesidad del uso de métodos que permitan la disminución de estos errores y también de profesionales que los dominen y sepan implementarlas en una organización. Te estarás preguntando ¿y cuáles son estos métodos?
En el siguiente artículo hablaremos acerca de Lean Six Sigma, uno de las metodologías de mejora de procesos más usadas en la gestión empresarial de cualquier tipo de organización a nivel mundial.
¿Qué es Lean Six Sigma?
Lean Six Sigma es un método de gestión centrado en el trabajo en equipo que tiene como objetivo principal mejorar el rendimiento mediante la eliminación de residuos y defectos. Esta combina dos técnicas, Lean y SIx Sigma. Por un lado, Lean hace referencia a cualquier método, medida o herramienta que ayude a la identificación y eliminación de los residuos. Y por otro lado, Six Sigma se refiere a las herramientas y técnicas que se utilizan para mejorar los procesos de fabricación.
De este modo, la metodología de Lean Six Sigma se enfoca en eliminar los aspectos que impidan o dificulten el ajuste del producto a los requisitos del cliente, reduciendo así, sus defectos en la entrega final.
¿Qué beneficios nos brinda esta metodología?
- Optimizarás los procesos para mejorar la experiencia del cliente y lograr una fidelidad.
- Desarrollarás flujos de procesos más eficientes y por ende, mejores resultados finales.
- Podrás prevenir los defectos reduciendo los costos y eliminando los residuos.
- Lograrás una estandarización en los procesos permitiendo una mayor agilidad organizativa y la capacidad de adaptarse a los retos diarios.
- Puedes reducir los plazos de entrega y aumenta la capacidad y la rentabilidad.
- Aumenta la agilidad organizativa implicando más a los empleados en el esfuerzo.